La córnea es una estructura muy importante. De hecho, la gran mayoría del poder dióptrico del ojo se debe a la córnea. Por ello, variaciones en su morfología, curvatura o potencia dará lugar a la modificación del estado refractivo del ojo. Más todavía en presencia de patologías corneales que pueden terminar afectando a la visión. Como el queratocono, queratoglobo o degeneración marginal pelúcida entre otras… En concreto, tal es la afección que dichas patologías producen en la córnea que será necesario planificar diferentes tratamientos. Algunos de ellos, pueden ser con lentes de contacto al principio… Pero si no producen el efecto deseado, pueden necesitarse tratamientos más invasivos. Es decir, cirugías como implantes de anillos intraestromales o crosslinking entre otros. En todos los casos, siempre intentando evitar un trasplante de córnea, que es la última alternativa… Debido sobre todo al riesgo de rechazo y a las complicaciones asociadas a esta cirugía.
¿Pero una vez realizado el trasplante de córnea o también conocido como queratoplastia se consigue ver bien? La realidad es que, en muchas ocasiones, los pacientes con trasplante de córnea presentan elevados errores de refracción. Además, al realizar una topografía de la córnea se observa que tienen importantes astigmatismos irregulares. Por dicho motivo, puede ser necesario corregir el error refractivo que se manifiesta después del trasplante de córnea. ¿Pero qué alternativas existen? El Prof. Diego López-Alcon experto en la adaptación de lentes de contacto esclerales os lo explica.
Trasplante de córnea: ¿qué alternativas para mejorar la visión?
Se puede pensar al principio erróneamente que después de la queratoplastia el uso de las gafas de vista es conveniente. En realidad, las gafas no mejorarán la visión después del trasplante de córnea en la mayoría de los casos. Y ello, es debido a que los pacientes intervenidos de queratoplastia presentan elevados grados de astigmatismo irregular. Además, cómo el astigmatismo irregular es corneal la alternativa de elección es la adaptación de una lente de contacto. Pero, tampoco cualquier adaptación de lente de contacto es aconsejable después de un trasplante corneal. De hecho, comúnmente se ha aconsejado la adaptación de las lentes de contacto rígidas corneales. El motivo de que sean recomendables es porque mejoran la visión en pacientes con astigmatismo irregular por queratoplastia.
Aunque, ¿son las lentes de contacto rígidas corneales la única alternativa para pacientes intervenidos de queratoplastia? No, las lentes de contacto esclerales también son muy recomendables para mejorar la visión en pacientes con astigmatismo irregular. Y no sólo eso, aportan una serie de ventajas importantes que es conveniente conocer.
¿Qué ventajas aportan las lentes de contacto esclerales?
Una de las principales ventajas de las lentes esclerales para queratoplastia es que no se apoyan sobre la córnea. Como su propio nombre indica se apoyan sobre la superficie de la esclera. Ello, inducirá mayor comodidad en el porte de las lentes de contacto para el paciente. Otra razón, quizás más importante, es que no hay apenas límites de parámetros. Es decir, cuando la córnea presenta grandes irregularidades, una lente corneal no podrá adaptarse. Se moverá mucho, se caerá y la visión será inestable. Sin embargo, una lente escleral sí la podremos adaptar. Casi sin límites de parámetros, consiguiendo una visión mucho más estable.
Otro de sus beneficios, es que permiten mantener la lágrima durante más tiempo en el ojo. En cualquier caso, el Prof. Diego López-Alcón recomienda analizar cada caso en particular. Es importante realizar un estudio minucioso de las características del ojo, para poder aconsejar qué lente escleral es la más adecuada en cada paciente.
2 comentarios en “Lentes esclerales para el trasplante de córnea”
Despues de un trasplante de cornea a que tiempo puedo utilizar las lentes de contacto
Hola Alejandro, no hay un mismo tiempo para todos los pacientes. Depende del tipo de trasplante y de la evolución del mismo. De forma más o menos generalizada podríamos resumir que entre 4 y 6 meses, aunque hay pacientes que deben esperar 12 meses a que se estabilice el trasplante. Lo más importante es no tener prisa y evaluar correctamente la salud de la córnea trasplantada. Saludos